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 [Artículo] Érase una vez un Despacho del Ciudadano

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Sangre de Castilla
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MensajeTema: [Artículo] Érase una vez un Despacho del Ciudadano   [Artículo] Érase una vez un Despacho del Ciudadano EmptyJue Jul 23, 2009 7:37 pm

[Artículo] Érase una vez un Despacho del Ciudadano 3127841369_e590896600_o

    La ciudadanía tiene varias maneras de participar en la política. Una de ellas, la más básica, es a través del voto en las elecciones. Esta es una de las más simples y pobres formas de participación, ya que tan solo se elige a un@s u otr@s candidat@s. Otra de las formas de participación que hay es haciendo llegar las ideas o las quejas que se tengan a aquell@s que nos gobiernan, siendo, aún así, una participación restringida.

    Pero claro, de gobiernos haylos de muchos tipos. Uno de los distintos ejes a la hora de valorar un gobierno es el de los canales de comunicación. En un extremo de este eje tendríamos un gobierno totalmente abierto con la ciudadanía, que informa, que consulta e, incluso, abre debates públicos para aprobar leyes. En el otro extremo del eje tendríamos un gobierno totalmente hermético, que informa lo mínimo y que cierra todos los canales de comunicación recíproca entre el gobierno y la ciudadanía.

    La voluntad de un gobierno, en este sentido, se nota en los pequeños detalles. Este es el caso del “despacho del ciudadano”. Cuando hubo el cambio de gobierno, mi máxima preocupación era saber quién ocuparía el puesto de Portavoz. Los dos gobiernos anteriores al presente habían tenido dos portavoces bien guapas, doña Bibianne y doña Irupe. Y yo, bien gustoso, había ido al despacho con cualquier excusa para poder hablar con mujeres tan bellas. Mi temor hasta entonces era que pusieran de portavoz a algún señor. Mi mente ya imaginaba a un tosco y antipático señor de enorme bigote recibiéndolo en el Despacho del Ciudadano. ¡De ser así, si que necesitaría tener un buen argumento para visitar el despacho! Pero la realidad superó a la ficción que mi mente había construido. Algo terrible pasó, un duro golpe para la ciudadanía, sí, peor que lo del señor con bigote! Desapareció el Despacho del Ciudadano como en un cuento de hadas.

    Y ahora volviendo a la seriedad, cuando un gobierno se despreocupa de mantener un canal de comunicación recíproca con la ciudadanía, lo que asoma es un indicio de autoritarismo, la ciudadanía queda alejada del poder (el poder de decidir, de participar) y aquello que debería de ser común a tod@s, lo público, lo político, se acaba convirtiendo en coto privado de un@s poc@s.

    Gusito
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